-No des a la enseñanza una forma que les obligue a aprender por la fuerza.
-¿Por qué?
-Porque no hay ninguna disciplina que deba aprender el hombre libre por medio de la esclavitud. El alma no conserva ningún conocimiento que haya entrado en ella por la fuerza.
-Cierto.
-No emplees, pues, la fuerza, mi buen amigo, para instruir a los niños; que se eduquen jugando, y así podrás también conocer mejor para qué está dotado cada uno de ellos.
(Platón)

domingo, 24 de enero de 2010

Cualidad o Cantidad

¿Cuáles son las propiedades reales de las cosas naturales?
- Según Platón y sus seguidores, y Aristóteles y los suyos (o sea, prácticamente todo el mundo antes del siglo XVI, menos los atomistas como Epicuro) las cosas se definen por diversas propiedades o cualidades.


Por ejemplo, el Fuego se define por la Sequedad y el Calor, las plantas se definen por la cualidad vital, la Vida, y así con todo. Conocer las cosas (naturales) es conocer sus cualidades propias o “esencia”, o “forma sustancial” (como la llamaron los aristotélicos medievales). (Moliere, el comediógrafo, se burló de esto, diciendo que el opio dormía porque tiene la “virtus dormitiva”. ¡Así lo explicaban todo los retrasados medievales!).

No es raro que una ciencia así no de lugar a mucha tecnología ni comercio. ¿Por qué?
Porque no se puede medir, es decir, no se puede reducir a cantidad.

- Este va a ser el gran postulado de la ciencia moderna: todo se puede medir y pesar.

Galileo dice: “la Naturaleza es un libro escrito en caracteres matemáticos”.
Muchos se acordaron de Pitágoras, quien se puso de moda, por diferentes motivos, en esa época “renacentista”.

Este postulado es mucho más importante para la ciencia que el uso sistemático de la experimentación sensible. De hecho todos los experimentos están encaminados a comprobar si determinada fórmula cuantitativa (matemática) es la que subyace a los fenómenos aparentemente cualitativos. En verdad, el color, el olor, y todo eso, no existen, son percepciones subjetivas, cualidades secundarias. Las cosas, en sí mismas, deben ser sólo cierta cantidad de espacio y tiempo, y como mucho, energía.
El mundo es homogéneo. Sus partes deben ser iguales, o sea, átomos.
Desde entonces, la ciencia sueña con encontrar una única naturaleza para todos los átomos: porque sólo eso puede medirse completamente.


Si esto lo aplicamos a los seres vivos, resulta que son máquinas químicas muy complejas; si lo aplicamos a los seres humanos, al arte, a la política… ¿qué resulta?

¿Qué os parece cada una de esas formas de ver la naturaleza, la “cualitativista” (aristotélica) y la “cuantitativista” (moderna)? ¿Os parece más lógica una que otra?
¿Creéis que tienen que ver con las ideas que nos hacemos de nosotros mismos en otros campos de la actividad humana?

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